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Dic 10 de 1948
Peláez y Gardeazábal agosto 1 de 2018
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Educación para seguir avanzando

Juan Manuel Santos

La agenda de la próxima década debe ser mejorar la calidad y los estándares de nuestra educación
En Colombia existen brechas inadmisibles en la educación. La brecha entre la calidad de educación que reciben pobres y ricos; la que separa a los sectores urbanos de los rurales; y aquella que diferencia a los colegios públicos de los privados. Estas brechas perpetúan las desigualdades sociales y de ingresos.
Si bien se han hecho esfuerzos en aumentar la cobertura de todos los niveles educativos, con avances sustanciales, la agenda de la próxima década debe ser mejorar la calidad y los estándares de la formación. Otro punto neurálgico es la baja participación de la educación técnica y tecnológica dentro de la oferta postsecundaria.

Para mejorar la calidad, proponemos, primero, definir y exigir altos estándares en el desempeño de docentes, estudiantes, y en la gestión de los establecimientos educativos. Segundo, mantener la evaluación tanto a estudiantes (pruebas Saber) como a profesores; y exigir una detallada rendición de cuentas. Tercero, en cada departamento, los colegios en el 20 por ciento más bajo en las pruebas Saber e Icfes entrarán en "Consejos de Mejoramiento", donde recibirán atención específica en las áreas críticas. Cuarto, se promoverá el bilingüismo desde los primeros años de educación, se ampliará la conectividad y el uso de tecnologías. Para el año 2020 habrá cinco millones de niños que lean, hablen y escriban correctamente el inglés.
La igualdad de oportunidades es otro factor indispensable para seguir avanzando. Cerraremos las brechas trabajando para que todos los niños, especialmente los más pobres, tengan acceso a soportes educativos básicos como el suplemento nutricional y acceso a textos, bibliotecas y materiales de apoyo. Combatiremos la deserción temprana estableciendo la obligatoriedad del grado cero (costo: 30.000 millones de pesos anuales).
Estableceremos la gratuidad de la educación básica para los niños de bajos recursos (costo: 110.000 millones de pesos al año), que se sufragará con el 1 por ciento del Sistema General de Participaciones. Apoyaremos a los docentes y las instituciones rurales, y quienes atienden las poblaciones en desplazamiento o dispersas y las minorías étnicas. Erradicaremos el analfabetismo.
Con respecto a la excelencia docente, ampliaremos los incentivos a la formación y capacitación permanente de nuestros docentes con el apoyo del Icetex, el MEN y el Sena. Fortaleceremos los programas que resalten a los mejores maestros y las mejores prácticas en el aula. Continuaremos la política de profesionalización en la contratación y de incentivos salariales.
En cuanto a la pertinencia, aumentaremos participación de la educación técnica o tecnología al 50 por ciento de la oferta educativa; hoy en 30 por ciento. Para esto, duplicaremos los programas técnicos de larga duración del Sena. Promoveremos una educación superior que estimule el emprendimiento, así como la necesidad de continua actualización, y prepare a los colombianos para el tipo de los trabajos requeridos en el nuevo siglo.
Avanzaremos en cobertura, pertinencia y calidad de la educación superior. Un cuello de botella para los jóvenes de escasos recursos es, además de los costos educativos directos, la necesidad de un sustento mientras estudian. Por eso, se duplicarán los créditos subsidiados y de largo plazo, a través del programa Acces de Icetex, que creé en el 2002, que subsidian las tasas de interés; alargaremos los plazos de los pagos. Los veinte mejores bachilleres de cada departamento recibirán cada año un subsidio total para sus estudios universitarios si mantienen un resultado académico de excelencia, semestre tras semestre.
Por último, propenderemos por que al final de esta década la mayoría de las universidades del país estén acreditadas. Como soporte, ampliaremos el programa de doctorados en universidades colombianas y la financiación para estudios en el exterior. La meta de mi gobierno será llevar la inversión anual en ciencia y tecnología a 1 por ciento del PIB.
Un país que se educa y que piensa en el futuro es un país que avanza, y da el salto de la Seguridad Democrática a la Prosperidad Democrática, prosperidad para todos.
* Candidato presidencial por el partido de 'la U'
www.santospresidente.com

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