Beatificación de Juan Pablo II, el camino a su santificación: biógrafo ~ La Otra Mitad de las Verdades a Medias

17 de enero del 2011 | MUNDO | Por DARÍO MENOR para El Tiempo Ciudad del Vaticano

El periodista italiano Gian Franco Svidercoschi, allegado al Pontífice polaco, habló con EL TIEMPO.

Pocos periodistas estuvieron durante tanto tiempo tan cerca de Juan Pablo II como Gian Franco Svidercoschi. Vaticanista durante años de L'Osservatore Romano, el diario de la Santa Sede, amigo y biógrafo del anterior Pontífice, destaca la importancia de la fecha elegida para la ceremonia de beatificación del Papa polaco.

"El primero de mayo es la festividad de la Misericordia, instituida por el propio Juan Pablo II. Este concepto está en la síntesis de su pontificado". Svidercoschi reconoce, además, que la beatificación tendrá una universalidad como si se tratara de una canonización, apunta que ésta puede producirse en sólo "dos años" y considera que relanzará "la herencia de Juan Pablo II".

¿Qué aporta a la Iglesia la beatificación de Juan Pablo II?
Es un gran paso para relanzar la herencia de Juan Pablo II, quien plasmó una nueva Iglesia, más ecuménica y espiritual, más laical y menos moralista. Este modelo de Iglesia podría ayudar también en este momento al pontificado de Benedicto XVI.

¿Le ha sorprendido la fecha elegida?
Hasta el último día se dudó también con el 16 de octubre. Pienso que una vez terminado el recorrido del proceso con la aprobación, el Papa ha hecho bien en acelerar las cosas, porque así ha elegido una fecha extremadamente significativa. El primero de mayo es la festividad de la Misericordia, instituida por el mismo Juan Pablo II. No es una festividad como otras. La historia de la Misericordia fue estudiada y cultivada por el Pontífice. Hizo incluso una encíclica sobre el tema, poco reconocida y recordada, la Dives in misericordia, donde fijaba la misericordia divina como el fundamento, mucho más que la justicia humana, de la dignidad del hombre. En este concepto de la misericordia del Papa está la síntesis de su pontificado.

¿Es una casualidad que sea también el día del trabajador?
Se relaciona con uno de los puntos del pontificado de Juan Pablo II. Este Papa se reapropió de las plazas, que durante muchos años eran el monopolio de la izquierda, la cual se había empadronado a su vez de palabras y valores que eran propiamente cristianos. Esto sucedía desde el tiempo de la Revolución Francesa, que se aprovechó de derechos que nacieron en el seno del cristianismo. El Papa recuperó estos valores para la plaza. Juan Pablo II, además, era un Papa que había trabajado, laboró incluso en una cantera de mármol. La beatificación de este Papa trabajador podría ser, por tanto, un momento de conciliación con ese mundo de la izquierda.

¿Piensa que la causa de la beatificación se ha realizado con todas las garantías o que la gran presión popular ha podido propiciar una aceleración del proceso?
Estoy seguro de que todo se ha hecho bien. Si no hubiera sido así, habrían terminado antes. El proceso para cerciorar el milagro ha alargado los tiempos. Ha pasado un año desde que éste fue examinado por los médicos. Hubiéramos necesitado más tiempo si el Papa hubiera decidido impulsar la canonización directamente. Hay, de hecho, una pequeña contradicción en los términos. La beatificación se reserva a quien tiene un culto local. Juan Pablo II supera claramente el culto local. El Papa muestra la universalidad de este caso decidiendo que la ceremonia se celebre en Roma y que sea él quien la presida.

Es una beatificación con sabor a santificación...
Así es. De hecho, podemos esperar que la canonización tenga lugar dentro de poco tiempo. Incluso dentro de sólo dos años.

¿Y eso dará tiempo para realizar todos los preparativos para la ceremonia, a la que se espera que acudan cientos de miles de personas?
El Ayuntamiento de Roma pidió hace un año tres meses para organizarse. Vendrán tal vez un millón de peregrinos de todo el mundo. El amor de este Papa llegó hasta los confines de la tierra.

DARÍO MENOR
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